Una sentencia obliga a IU a rectificar una información falsa
La concejala debería presentar su dimisión por vergüenza política y si de verdad defiende los intereses de su formación
Carmen Álvarez no podrá esconder más sus mentiras detrás de su histriónica risotada. No hay nada peor para un político que ser mentiroso y la concejala de IU Carmen Álvarez lo ha sido siempre. Pero ahora también por sentencia judicial. El Juzgado número 2 de Sanlúcar la obliga a rectificar una información en la que en su afán por atacar a Víctor Mora injuria a una entidad señera como es Afanas.
En política no todo vale y la manera de hacer política de esta señora es mentir y atacar en lo personal. Su forma de actuar representa lo más rastrero de la política. La mentira y el engaño vienen siendo sus herramientas y ahora queda reconocido en sentencia judicial.
Como concejala portavoz de IU y diputada provincial, Carmen Álvarez, con un gran sueldo, algo con lo que también engañó y atacó al Gobierno local, debería presentar su dimisión por vergüenza o al menos por no dañar más la imagen de su formación.
Esta edil lleva años utilizando la mentira de manera impune para conseguir sus avariciosos fines personales. Primero dentro de su formación, logrando quitar de en medio a toda persona que le podía hacer sombra. Ahí están las dimisiones de miembros de su lista tras cada convocatoria electoral. Y los pocos que le quedan, también por vergüenza, no deberían salir ahora arropándola ni siquiera por pena. A no ser que se vean obligados por los favores personales y laborales de la personal red clientelar de la señora Álvarez.
Los ciudadanos ya no la creen, ya no se fían, ya saben que todo es mentira. Saben que detrás de una pose y de un discurso sacado de internet no hay una persona que verdaderamente luche por sus intereses. Lucha solo por sus intereses personales.
En su afán por dañar personalmente a su adversario político es capaz de dañar a cualquiera, como ha ocurrido en esta ocasión.
Señora Álvarez, en política no vale todo, y aunque usted gane mucho dinero con ella, la mentira, como dice el refranero, tiene las patas muy cortas. Váyase y deje paso a personas que trabajen por derecho por Sanlúcar y por sus ciudadanos.
Sanlúcar de Barrameda, 9 de febrero de 2020
